sábado, 5 de marzo de 2011

México o Chicago años 30

Cuando abrí mi correo y leí el mensaje de la Red de Acciones Urgentes de Amnistía Internacional no daba crédito a lo que veía: "El 25 de febrero, los cadáveres de Malena Reyes, Elías Reyes y Luisa Ornelas fueron hallados en una gasolinera del municipio de Guadalupe, Distrito Bravos, en el Valle de Juárez, al este de Ciudad Juárez, estado de Chihuahua."

Hace dos semanas, esta misma red pedía colaboración a sus miembros para que denunciasen la desaparición de los ahora hallados muertos y la semana pasada se denunciaba el incendio provocado de su domicilio mientras sus familiares protestaban por su desaparición. Tras el asesinato de seis de miembros de la familia (los tres de ahora más tres anteriormente), los restantes se están planteando emigrar de México para evitarle más sufrimientos a la matriarca, Sara Salazar

Las matanzas y desapariciones tienen que parar en México. Ningún país puede estar supeditado a las mafias de cualquier tipo sin que sus ciudadanos se resientan por ello. Es agotador vivir permanentemente en la lucha, pero somos una minoría dentro de las minorías los que pensamos que esta guerra sólo tendrá su fin cuando los derechos humanos, de la infancia, de la mujer, ... sean una realidad. No porque Gaddafi o Mubarak sean historia podemos dejar la lucha. Quizás puedan parar los activistas libios, egipcios o tunecinos, que tienen mucho que hacer en su país, pero los demás tenemos que seguir vigilantes para que los gobiernos en general no se confíen.

Y mientras la revuelta en Libia está provocando una crisis de refugiados en Túnez y en Egipto, el ambiente de guerra civil en Costa de Marfil ha desplazado a Liberia un número de personas que podría haber alcanzado los 200.000 según denuncia ACNUR. Además de que ocho periódicos hayan parado su actividad en protesta por las amenazas recibidas en la disputa por la presidencia, las fuerzas oficialistas del hasta ahora presidente Gbagbo han asesinado al menos a seis mujeres cuando protestaban por la situación que se vive en el país desde las elecciones de noviembre. También llegan informaciones de que la mitad norte del país, leal al presidente electo Alassane Ouattara, permanece sin electricidad ni agua corriente y hoy sábado se habla ya de guerra civil abierta en algunas zonas del país incluyendo la capital económica, Abiyán.

Cuando el precio de los alimentos vuelve a marcar su máximo desde que se mantienen las estadísticas (hace 20 años) no podemos dejar de hablar de la India, uno de los recurrentes de este blog. Y es que es digno de lectura el artículo de opinión del New York Times en el que fundamentalmente se dice que la forma de ser de los indios, su forma de ver el mundo, es un obstáculo para el pleno desarrollo económico y democrático. Todo esto claro visto desde el punto de vista de un norteamericano, porque si se mira desde el punto de vista de un español puede que no se entienda lo que dice el artículo ya que se podría aplicar a nosotros lo que se dice de los indios en el artículo prácticamente en toda su extensión. ¿Y quién se atreve a decir que nosotros no somos una democracia desarrollada?

¿Llegará la revolución a la India?. De momento en Arabia Saudí, definida en Al Jazeera como "una monarquía absoluta sin parlamento electo", han prohibido totalmente las manifestaciones y los actos de protesta de cualquier tipo mientras envían tropas a las zonas de mayoría Chií, que son las que han registrado mayores disturbios. Parece que en aquella zona del mundo la lucha por la libertad que mantienen en el norte de Africa se va a convertir en una disputa entre Suníes y Chiíes.

La noticia curiosa de la semana viene de Japón cuyo gobierno ha decidido parar la ayuda al desarrollo a China, dentro de el programa de medidas para reducir el déficit. Obviamente vivimos en un mundo completamente loco, en el que la segunda economía del planeta (hasta hace un año era la tercera por detrás precisamente de Japón), recibe ayuda al desarrollo mientras decide aumentar su presupuesto para la fabricación de armas.

Según escribo continúan llegando noticias de la situación en Libia. Yo diría que si no ha empezado ya, están al borde de la guerra civil pero los Twitteros libios insisten en que ni es una guerra civil ni se necesita la intervención internacional para parar la matanza. ¿Qué opináis?, ¿sería conveniente enviar fuerzas de la OTAN o es mejor esperar y ver si realmente los revolucionarios tienen la fuerza y los apoyos suficientes para acabar con el régimen?. ¿Qué pasaría si Gaddafi se mantuviera en el poder, cómo reaccionaría la diplomacia internacional después de haber aplicado las sanciones de la ONU?

Os dejo esta semana con imágenes de las ciudades de Mahabalipuram y Kanchipuram en el estado de Tamil Nadu, sureste de la India, tomadas en octubre de 2008 en mi viaje con Marina y Clara